La primera vez
Para más información, véase ‘Guía práctica’ (p. 859)
- Comprobar la validez del pasaporte, que no caduque antes de regresar.
- Si se vuela, disponer de un billete de vuelta.
- Tramitar el seguro de viaje.
- Gestionar las reservas (alojamientos, circuitos, puntos de interés…).
- Informar a la compañía de la tarjeta de crédito/débito.
- Comprobar que pueda usarse el móvil.
- Vacunarse, si es necesario.
- Consultar las recomendaciones gubernamentales para viajar a México.
Adaptador eléctrico.
Bañador.
Linterna.
Permiso de conducción.
Sombrero y gafas de sol.
Protector solar.
Ropa impermeable.
Calzado robusto.
Ropa de abrigo.
Antidiarreico.
Consejos
- Esperar lo desconocido. Si todo resulta demasiado extraño, hay que alojarse en un lugar donde uno se sienta cómodo. En casi todas las ciudades hay comida internacional.
- Ir al campo y poblaciones pequeñas, donde se aprecia una vida mexicana que muchos turistas no ven.
- La violencia del narcotráfico solo se da en un número reducido de lugares, sobre todo en localidades fronterizas, y no suele afectar a los turistas. Las zonas más visitadas del país apenas sufren actos violentos; aun así, se aconseja prudencia.
- Aceptar que no todo funciona como un reloj; hay que relajarse.
- No se debe abarcar demasiado; es mejor elegir la parte de México que interese más.
Cómo vestirse
En las ciudades de playa, abundan el pantalón corto, la minifalda y las camisetas de tirantes. Hay que llevar ropa larga para protegerse del sol y los mosquitos, y para el anochecer o zonas no playeras. En las iglesias se debe vestir con decoro. Se necesitará un jersey o chaqueta para el aire acondicionado. También se precisará de un sombrero; en México son buenos y baratos.
Dónde dormir
Hay que reservar alojamiento para la primera noche, si se llega tarde y si se viaja en temporada alta.
Hoteles Existen de todo tipo, desde básicos y económicos hasta hoteles-boutique y de cinco ⭐⭐⭐⭐⭐.
Albergues Se hallan en los destinos para los viajeros de presupuesto ajustado. Muchos tienen buenas instalaciones y a menudo habitaciones privadas.
Cabañas Sobre todo en los destinos de playa y van desde muy básicas a lujosas.
‘Campings’ y hamacas En las zonas de playa, a menudo se puede dormir en una hamaca o plantar una tienda de campaña por poco dinero.
Dinero
Las compras se realizan con pesos. Pocos negocios aceptar US$. Resulta fácil sacar de los cajeros con una tarjeta de crédito o de débito; todos los aeropuertos internacionales tienen cajeros. Consérvese una pequeña reserva de efectivo (US$ o €) para cambiar. Se puede pagar con las principales tarjetas de crédito y débito en muchas aerolíneas, hoteles de precio medio y alto, restaurantes y tiendas.
Regateo
Merece la pena preguntar si se ofrecen descuentos en las habitaciones, sobre todo en temporada baja. En los mercados se espera algo de regateo. Los taxis sin taxímetro suelen rebajar algunos pesos al precio inicial.
Propinas
Muchos trabajadores dependen de las propinas para complementar sueldos muy bajos.
Restaurantes Del 10 al 15%, a menos que el servicio vaya incluido en la cuenta.
Hoteles Es educado dejar 5-10% del precio de la habitación para el personal de la limpieza.
Taxis No esperan propina, a menos que ofrezcan un servicio extra.
Porteros En aeropuertos y hoteles suelen esperar entre 50 y 100 MXN.
Asistentes En aparcamientos y gasolineras suelen esperar entre 5 y 10 MXN
Protocolo
Los mexicanos no son muy estrictos con la etiqueta, a la cual anteponen su cordialidad natural.
Saludos “Mucho gusto” es la expresión que se utiliza cuando se es presentado a alguien, junto con un apretón de manos. Si es entre un hombre y una mujer, la mujer ofrece la mano primero.
Ser agradable A los mexicanos les encanta oír que al viajero le gusta su país. No son dados a criticar o discutir, y expresan desacuerdo de forma muy sutil.
De visita Una invitación a un hogar mexicano es un honor para un extranjero; se recibirá un trato muy hospitalario. Se debe llevar un pequeño detalle, como flores o un obsequio para los niños.